Mi nombre es LOLA CONDE.
Nací en la bonita ciudad de Camas, Sevilla, un 31 de
diciembre.
Según me contaron, mi madre aquel día estaba lavando en la
pila cuando sintió un dolor muy fuerte, mi abuela tiró de
ella la sentó en la escupidera y allí me dió a luz.
Cuando llegó la matrona, yo ya estaba en el mundo y con un
chichón en la cabeza. A los trece años terminé los
estudios primarios y enseguida comencé a trabajar porque en
casa pasábamos muchas necesidades. Aunque nunca faltó el plato
de comida.
Actualmente trabajo en un I.E.S. como ordenanza desde hace
18 años con la gran suerte de tener compañeros profesores
de Lengua. Una vez le pedí a uno de ellos que me dejara un
libro de Gramática para recordar todo lo olvidado, porque
quería emprender el viaje mas apasionante de mi vida para
descubrir la octava maravilla del mundo.
Me preguntó: ¿Como dices?
Le contesté que iba a escribir un cuento. Me felicitó y me
dijo: Adelante Lola. Yo puedo ayudarte con la teoría pero
no tengo creatividad para crear dos frases seguidas.
Así que aquello que me dijo me hizo reflexionar y me dije:
Tengo lo mas importante a mi favor, puedo con mi imaginación
darle vida a un grano de arroz y que una patata se llame Maruchi
y le crezcan alas…
Por circunstancias de la vida, no pude hacer realidad mi sueño
que era estudiar psicología; así que me aferre a los libros.
Ellos han sido mis muletillas para aprender, soñar, viajar,
llorar, reír y mucho más. Han sido el atajo que decidí coger
para crecer. |