Cuando 
                    una voz muere 
                    otra resucita 
                  Un grajo sobrevuela mi casa 
                    la rata se ha escondido en la cocina 
                    el cuchillo ha cortado el amor en dos pedazos 
                    y el monstruo se ha comido el más apetitoso 
                  Siempre, cuando una voz muere 
                    otra resucita 
                  Una bayeta, el detergente, el agua oscura del 
                    fregadero 
                    la suciedad que se limpia, el secreto que se oculta 
                    la violencia que enferma 
                  En este hogar siempre ha sido invierno 
                    los latigazos eran el alimento de mis hijos 
                    y la barbarie mi obligado juego cotidiano 
                  Pero yo lo he descubierto: 
                    Cuando una voz muere 
                    otra resucita 
                  Así que llegó la soñada 
                    última noche 
                    y mi mano ya deforme arrancó a la mandrágora 
                    desterró al enemigo 
                  Amaneció, es el gran día 
                    el tiempo de amar, y ya lo he dicho: 
                    Cuando un monstruo muere 
                    una mujer resucita. 
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