La sombra de los muertos
Qué lejos va quedando
Como un equipaje que no recoge nadie
De la cinta continua de un aeropuerto
O una taquilla cerrada
En una olvidada estación
Sólo el tiempo templo siempre
Tantas horas y palabras tantas
En imágenes falsas
Reducidas
O en fantasmas
Oleaje de cenizas sobre el párpado
En la danza rasa de la sala
Sucio mar de cristales tras un baile
Negras lanzas sus columnas
Arañan mansas ya
Con astillas cóncavas de labios en la frente
Con sus nombres que eran bálsamo
Y hoy apenas
ecos sin respuesta
Me pregunto
Si fueron así sus vidas
Y eran solos únicos y son
La garganta enmudecida
Llama que declina o sangra
Ahogado desolado tala
En una sonrisa resignada
Hueca falsa como falsa mueca
Vestigio último de edad primera
Y eran páramos sus vidas
Como es ésta desierto ahora
Sediento cuando la tarde indiferente
Cae pesada
losa gris
Granito sobre la esperanza
Sobre las fuentes esquilmadas de paciencia
Cansado como entonces de beber
Borracho hasta la polla y harto
De no esperar ya nada
