Estás en > Mis repoelas > La buhardilla

POETAS Y ESCRITORES ENTREVISTADOS

 

ENTREVISTA A LA POETA YOANNA MOJÓN


REALIZADA POR:
ADOLFO MARCHENA

La poeta y escritora  Yoanna Mojón
“Se trata de escuchar lo que el silencio guarda”


Yoanna Mojón (Vitoria-Gasteiz, 1990). Ha participado en talleres de escritura creativa y poesía en asociaciones y centros cívicos. Participa anualmente en el festival internacional de poesía Poetas en Mayo llevando a cabo diferentes recitales y acciones poéticas. Ha colaborado en revistas como Kaskarina y Azharanía. En 2018 publicó su primer poemario, Reciclaje alternativo. Miembro de la asociación Krelia, creadores literarios de Álava. Su último libro publicado lleva por título Nerea.
Adolfo Marchena: ¿Qué se puede perder o ganar cuando una musa te lleva?

Yoanna Mojón: Cuando una musa te lleva llegas a lugares donde no se puede ganar o perder. Solo estar, sentir, disfrutar de emociones intensas, podría decirse que es ganar, pero no es ganar si no se puede perder y mientras la musa te lleva esto es continuado y no desaparece. Es fluir.

A.M.: En el poema que abre el libro uno de sus versos dice: «Muchas vidas haciéndote musa y yo haciéndome poeta». ¿Cómo se edifica la poesía de Yoanna?

Y.M.: Es una especie de construcción en lo abstracto. En un lugar donde todavía no se ve pero sí se siente. Verso a verso la magia se desata.

A.M.: Federico García Lorca dijo: «Poesía es la unión de dos palabras que uno nunca supuso que pudiesen juntarse, y que forman algo así como un misterio».

Y.M.: Hay infinitas posibilidades de combinar las palabras, ¿cómo saber cuál puede ser la que brilla en cada instante? Hay que adentrarse en ese estado de conciencia, en ese apartado del cerebro donde está la poesía y ella suena por sí misma. Se trata de escuchar lo que el silencio guarda.

A.M.: La ausencia vertebra, en cierto modo, la arquitectura de Nerea; ¿hacia dónde miras, «con la piel desnuda»?

Y.M.: Nerea es especial por infinitas causas, una de ellas es su poder para guardar el mar en sus ojos. Algún día su piel también será mar y en su recuerdo sé que encontraré la calma.

A.M.: Si te digo: «Buenas noches, luciérnaga»; ¿qué carta me desvelas?

Y.M.: Qué menos que el as de corazones. Nerea es un ser de luz y nada más conocerla se convirtió para mí en una luciérnaga.

A.M.: Precisamente, el libro se estructura a partir de esa luciérnaga que comienza siendo de sueño (pág. 11)

Y.M.: Para la estructura de este poemario escogí algunos mensajes enviados con el móvil de buenas noches que yo misma enviaba a la luciérnaga junto con los poemas sobre todo con la intención de recordarle que no dejara de brillar. Creo que una de las cosas más importantes es que no se nos apague la luz.

A.M.: El poeta francés Alfred de Musset dijo: «Ni la ausencia ni el tiempo son nada cuando se ama».

Y.M.: Yo diría que el tiempo sí es algo. No necesariamente malo, pero es algo que hace que las cosas terminen. De ahí mi deseo utópico de romper todos los relojes que existieran cada vez que los minutos pertenecían al mundo de la luciérnaga.

A.M.: La escritora y poeta Ángela Mallén nos dice en el prólogo que tus versos «están filmados a cámara rápida, como el crecimiento de las flores…»

Y.M.: Creo imágenes originales con cierta rapidez y si estás atento a la lectura no hay lugar al aburrimiento. Podría ser que al principio del poema tienes un capullo y al final ya tienes la flor.

A.M.: Nerea es un intenso canto, un reconocimiento, a mi entender. ¿Cuánto hay de elegiaco y también de nostalgia en sus poemas?

Y.M.: Para mí realmente solo ha habido una intensa felicidad desde el principio hasta el final y cada poema pretende ser un presente para esa persona tan especial y cómo no una forma de recoger nuestra historia y nuestros momentos más bellos.

A.M.: ¿Es necesaria la pérdida para reconocer las cosas y apreciar los pequeños detalles?

Y.M.: Yo creo que no. En la consciencia se pueden apreciar muy bien los pequeños detalles y no es necesario perder, pero claro no siempre estamos en ese estado de consciencia.

A.M.: En el poema Despierta o dormida no distingo, en el tercer verso dices: «Me da igual si sueño o realidad»; ¿Sabemos diferenciar una cosa de la otra?

Y.M.: Yo haría más bien otra pregunta, y es ¿queremos diferenciar si sueño o realidad? Y supongo que todos alguna vez no queremos, porque si está sucediendo qué importa en qué realidad. La cuestión es vivir soñando y nunca dejar de hacerlo, pero sin ser un dormido.

A.M.: Por último, y como siempre digo en mis entrevistas: ¿Deseas añadir algo a esta entrevista donde, con toda seguridad, me habré dejado alguna cosa en el tintero.

Y.M.: Solo puedo decir que Nerea ha sido un viaje apasionante en todos los aspectos, vivirlo, sentirlo y escribirlo. Y por supuesto poder compartirlo.

Entrevista realizada a la poeta Yoanna Mojón por el poeta, escritor y prologuista Adolfo Marchena.

 


Página publicada por: José Antonio Hervás Contreras