Te deja así un poco
loca,
desmemoriada o a medios
recuerdos.
Con la luna en menguante,
y su lado oscuro alumbrando
a otra galaxia,
que no esquiva nada
dulce y exquisita
tierna y con el frío
en la piel.
El amor tiene a tiempo
el momento,
la alarma y la sincronía
el desvelo necesario
y a punto el aroma
en este tándem perfecto
el coctel que transporta
o la espuma del
buen café en tarde
de invierno.
El amor te deja así
queriendo
amando
después
más.