Trago el último sorbo de la lluvia
                      y contemplo cual impala solitaria
                      el acantilado de mis ansias 
                      apagarse poco a poco el farol del alma.
                      
I            
                    Con desdén miro mis pasos
                      se niegan transitar
                      sobre los piensos olvidados
                      y atravesar el oscilante hoyo del ocaso.
                      
II            
                    Me zambullo en el almíbar de la vida
                      sonriéndome al óbito sin cavilar.
                      Los días ciegos caminan descalzos
                      sobre espinosos rieles con valor inalterable.
                      
III            
                    Mi mirada atardecida
                      con los pies de plomo parada
                      ante un orbe de multitud ausente
                      completamente sola.
                      
IV            
                      
                      Con la amortajada soledad
                      colgadas por pendientes de la nada
                      nos vamos de risas a patas sueltas,
                      somos dos núrias mordiendo tempestades.
                      
V            
                    observando el ciclo de la vida.
                      La vida es robusta
                      y de cuando en cuando
                      sus huesos enflaquecen.
                      
VI            
                    Un forajido viento espada en mano
                      rompe mi cofre robándome el alma,
                      se aleja raudamente a carcajadas
                      dejando mi aura desmembrada.
                      
VII            
                    Como fantasma despeinada muerdo mi cruz,
                      cubriéndome de añeja brisa moribunda
                      frente a un mundo mudo descabezado
                      me cree huérfana sombra encapsulada.
                      
VIII            
                    El náufrago anciano tiempo se acerca,
                      hay fiesta en la profundidad del abismo
                      viene por mí, me solapo en mar de tristezas
                      temo asistir, no estoy lista, 
                      estoy desnuda.
                      
IX            
                    Desnuda el agua
                      desnuda la lluvia
                      desnuda la tierra
                      desnuda la vida.
                      ¡Estoy…, desnuda!