Estás en > Mis repoelas > Colaboraciones

 
Del poemario "CAMPO DE BATALLA" (I)
 
A partir de un cierto punto, ya no hay regreso posible. Este es el punto a alcanzar.

Franz Kafka


Existimos perdidos en un tiempo oblicuo
desgarrado por el punzón mortal
de la injusticia y el agravio.
Tropiezo con los cuerpos despojados
de luz y de deseo.
Contemplo sus rostros desahuciados
el grito ya silenciado
el grito ya encarcelado
entre labios cárdenos
y rictus petrificados por el terror
de su final cercano.
Pero la luz refulge insistente
sobre mi sien consternada
acaricia mi fragilidad
me acoge en su transparencia
me anima
me calma
como el candor del ámbar.
Avanzo esquivando cadáveres.
Allí está tendida la humanidad
desalmada, inerme.
Yacen desvanecidos los cuerpos mutilados
por el desacuerdo
la incomprensión
la ignorancia
pero yo permanezco contigo
excavando tu alma
los dos enfrentados
los dos reflejados
el uno en el otro
perdidos en la esencia
de nuestro ser seriado
dividido
multiplicado.
Nuestro ser soñado
ideado
fingido
engendrado.
Nuestro ser ficticio
aparente
figurado
sagrado
desangrado.
Nuestro ser
sacrificado.
Vagamos perdidos
en el enigma de nuestra existencia
en el exilio del ser y del no ser
el no ser oxidado
marchito
cancelado.
El no ser
oculto
exangüe
aniquilado.
El no ser
intangible
incorpóreo
extraviado.
Perdidos siempre en el delirio del misterio
en lo infalible del secreto
en la incógnita del ser
del no ser
de simplemente existir.
Sigo avanzando entre ruinas y cenizas
recojo mis sueños
esparcidos entre la sangre y el fuego
también los recuerdos.
Grito mi nombre
el tuyo
-agazapado en la maleza del olvido-.
Avanzo despacio
el tiempo es todo lo que tengo
grito mi nombre
tu nombre
el tuyo
el mío
el de la aurora que nos otorgó la vida
el de la noche que nos abandonó.

Selección de poemas escogidos de © Marga Clark, elegidos amablemente por la autora, para su publicación en la revista mis Repoelas:






Campo de batalla (I) ~ : ~ Campo de batalla (II)

Campo de batalla (III) ~ : ~ Amnios ~ : ~ El olor de tu nombre


 


Página publicada por: José Antonio Hervás Contreras