| Del
poemario AMNIOS
Me arrastro a ciegas por tu membrana amurallada donde sólo
habla el rugir de tu sangre. Trepo por tus curvas empinadas
hasta alcanzar la cima. Siento tu amanecer pero no te recuerdo.
Te intuyo
Te siento
Pero no te recuerdo.
Me sumerjo en tu tibieza. Recorro tus rincones más
recónditos, tu pozo transparente, tu tumba descarnada,
tu cripta enmudecida. Me busco en tu mausoleo de memorias
pero no me encuentro.
Ayer era hálito y hoy incógnita porque
No me siento
No me encuentro
No me recuerdo
Mis manos desolladas acarician tu paisaje entumecido. Me arrastro
hacia la luz pero sólo tropiezo con las sombras. Tu
niebla me conforta. Tu orilla se entristece, se desborda.
Pero no te veo
No te oigo
No te encuentro.
Pero no te miro
No te escucho
No te recuerdo.
Soy un despojo de tu ser
Un residuo de tu transcurrir
Un germen de tu acaecer.
Pero no me siento
Pero no me encuentro
Pero no me recuerdo.
Estoy perdido en tu frondoso vacío. Desvelado por tu
respirar acompasado; ese orden que me aturde y desconcierta.
Me acuno en tu brisa recogido en tu sombra. Soy testigo de
tu luz, huérfano de tu anochecer, preludio de mi despertar.
Mi despertar aconteció mucho antes del sueño,
de la conciencia, de la razón, de lo invisible. Mi
corazón despertó mucho antes del aleteo de la
muerte.
Y no puedo recordar.
Tu gemido azul me traspasa el ser como un dardo afilado. Corro
en busca de tu sentir oscuro por tu paisaje agrisado.
Y no te puedo encontrar.
Tus venas encendidas alumbran mi soledad. Recuesto mi desánimo
en tu tronco, tu suave corteza de avellanos y abedules. Escarbo
en la tierra hasta encontrar tu raíz, mi larva adormecida.
Me refresco con tu savia. Tus ramas acarician mi incertidumbre.
Sé que llegará otro día, otro anochecer
Y no puedo recordar
Y no te puedo encontrar.
Pero dibujo en tu arena tu gesto allegado
Tu entraña sin fondo
Tu dolor.
Y aunque no te recuerdo
esbozo tu forma sin líneas
sin contorno.
Y aunque no te encuentro
tanteo tu origen sin principio
sin cimiento.
Estoy suspendido en tu silencio
En tu devenir
En tu lento transcurrir.
Pero no te siento
Pero no te encuentro
Pero no te recuerdo.
|